Llega el verano, la mejor época para muchos. Tiempo libre, buen tiempo, muchos planes y horas y horas bajo el sol disfrutando de la piscina o la playa. Unos meses donde todos lo pasamos en grande y los cuales no queremos que nunca se acaben. Sin embargo, puede que para tus joyas no sea la mejor época. 

 

Estos complementos que tanto amamos pueden resentirse por numerosos factores durante los meses de verano y, por ello, necesitan un cuidado extra si queremos que nos duren más allá de septiembre. En este blog queremos darte unos consejos para que protejas tus joyas y estén siempre como el primer día. Para los más descuidados o los amantes de estos geniales complementos, os encantará lo que os vamos a contar ¡muy atentos!

 

La limpieza de siempre no puede detenerse

 

Una premisa fundamental para conservar tus joyas brillantes y como el primer día es realizar la limpieza habitual sin parar por estar de vacaciones, fuera de casa, etc. Un poco de agua y jabón neutro pueden hacer grandes milagros. Por favor ¡ no productos agresivos que puedan dañar nuestras joyas seriamente!

 

Precaución antes de sumergirnos en el mar o la piscina

 

Afortunadamente, durante el verano tenemos la oportunidad de darnos un remojón en la playa o la piscina. Esto no debe significar que descuidemos la protección de nuestras joyas. 

 

Es preferible no sumergirnos con ningún complemento de bisutería, cuero, madera, abalorios… Todos estos elementos son especialmente sensibles al agua y, sobre todo, a elementos como el cloro o el salitre, que pueden terminar decolorándolos o agrietándolos. Todavía más cuidado debes tener si tu plan es acudir a un spa o balneario ¡ahí si puedes llevarlas encima! Estos lugares utilizan un tipo de agua que es altamente perjudicial para nuestras joyas.

 

 

Las cremas solares no protegen a todos

 

Durante el verano hemos de ser responsables y utilizar protector solar. Eso sí, debes recordar quitarte cualquier joya antes de aplicarla en tu cuerpo. Pueden causar daños irreversibles a nuestros complementos ¡mejor ser precavidos!

 

 

Cada joya es un mundo

 

Las perlas contienen agua y, por ello, a elevadas temperaturas pueden ser susceptibles de evaporarse, el oro amarillo deber ser vigilado pese a ser una pieza muy resistente, la plata puede verse afectada excesivamente por el sudor o el salitre… Cada joya es un universo y nuestra labor ha de ser conocerlo más en profundidad para saber hasta qué punto un mal uso durante estos meses de calor puede dañarlo de forma irreversible.

 

 

Esperemos que os hayan gustado nuestros pequeños consejos y que os sirvan para cuidar de vuestras joyas de la mejor manera durante este verano. Y para los que todavía no habéis encontrado esa joya que marque tu verano más radiante, no podéis dejar de pasar por A tu Joya en nuestro centro comercial ¡ahora con más ofertas que nunca!